Los Andes tropicales se encuentran entre las áreas de mayor biodiversidad del planeta. Las
comunidades que viven en ellos o en su entorno dependen en muchos aspectos de los diferentes
bienes y servicios que los ecosistemas andinos, con sus innumerables especies, les proveen.
La integridad de los ecosistemas de los Andes tropicales se encuentra seriamente amenazada por
el cambio climático y los cambios en el uso del suelo. Se espera que estas problemáticas ambientales
provoquen un profundo impacto en la supervivencia, la distribución geográfica y las interacciones
ecológicas de las especies andinas, y por lo tanto, una disminución en su capacidad de proveer bienes
y servicios vitales para los seres humanos. Los estudios y la metodología estándar desarrollados en
este proyecto presentan un gran potencial para contribuir de manera significativa a los análisis de
vulnerabilidad y adaptación en la región y al desarrollo de nuevas estrategias de conservación.
La meta es dotar a los países de los Andes tropicales de una metodología estándar que permita
estimar, a escalas locales, los efectos del cambio climático sobre la biodiversidad, y que a su vez
pueda ser utilizada para diseñar medidas adaptativas apropiadas para cada situación.
El objetivo general era llevar a cabo durante más de cuatro años (2011 - febrero 2016) estudios de
caso sobre tendencias de cambio climático a corto y mediano plazo, patrones y gradientes de biodiversidad,
y la vulnerabilidad de las especies y ecosistemas al cambio climático y a los cambios en el uso del suelo
en dos áreas transfronterizas objeto de estudio: la vertiente Pacífica de los Andes del Norte, en la zona
fronteriza entre Colombia (departamento de Nariño) y Ecuador (provincias de Carchi, Esmeraldas e Imbabura);
y la vertiente Amazónica de los Andes Centrales, en la zona fronteriza entre Bolivia y Perú (áreas protegidas
Madidi y Apolobamba en Bolivia, Bahuaja-Sonene y Tambopata en el Perú).
